De no-se-quien

La ultima vez que venia de Culiacán para aca al DF, en -aguilbir- autobús, una chilanga comenzó a hacerme platica durante todo el trancurso entre Guadalajara y la ciudad de México.

Sus padres se habian divorciado y su papá vive en Culiacán con su esposa, su mamá continua en el DF, y se volvió a casar con un tipo regordete -jojojo-, ella (no recuerdo su nombre) platicaba y platicaba y yo nomás oia y oia porque me parecio que seria de muy mal gusto ponerme en ese momento los audifonos e imaginar que mientras movia los labias, entonaba alguna rola a la manera de Anneke. Total que al llegar a la Central de Norte, me pidio mi número de telefono, hasta eso que no lo negué ni dí un número falso pues se veia buen rollo (y me habia contado que tenia muuuchas amigas y familiares feminas, mjmj). Ahi fueron a recibirla su hermana su mamá, sus animales-que-parecian-suricatas y el regordete de su padrastro, juar... igual seguí mi rumbo porque nadie fue a recibirme (ps quien?), snif, y ahi se fue su servidor solo y cargando su maleta a cuestas en busca de un taxi que me jalara pa'l depa... ¿asi esta bien la escena?, ¿ó más deprimente?.

Hace unos dias, mis roomies me avisaron que me habia llamado, pero por no estar en el depa, anotaron su número para que le devolviera la llamada, el problema fue que lo anotaron en un huarache, se hizó perdedizo y ahora no lo encontramos al cabrón.
Pinchi huarache, ¿donde habrá quedado?

Y no se porqué, pero sentí escalofrios al leer este post de Itzel, ¿no será ella? (musica de misterio al fondo por favor). Alcanzo a recordar que me contó algo parecido respecto a sus estudios de árabe... creo, creo...