Salida de méxico: mi momento madrid y la llegada de un borracho mexicano a paris.
Hace 2 viernes salia en chinga del depadelrock porque pasaba por la maleta pa' jalarme al aeropuerto, tomando el taxi manejado por el morro mas pendejo que hay en el DF hice cerca de una hora y casi pierdo el vuelo a la madrid, a donde llegue para hacer mis traslado a las francias. Un vuelo de 12 horas seguramente no parece algo muy atractivo, y pa' mi no lo hubiera sido si no hubiera sido porque... bueno, un puto vuelo de 12 horas es de la chingada.
Apenas llegue a madrid, lo primero que hice fue llegar por cigarros al aeropuerto porque en españa no pasaría por ninguna ciudad, pero a huevo quería cigarros españoles, y nel, los pinchis gachupines fuman lo mismo que nosotros. Durante la hora que tuve que hacer de espera para el vuelo de la madrid a las francias conocí a un veracruzano que iba a quedarse a vivir en la zaragoza unos 6 meses y a una colombiana que comenzó a sacarnos platica de la nada, ya me estaba pareciendo guapa la colombiana hasta que menciono que tenia 17 años (pos que chingados les dan de comer a esas viejas?!) y que mi vuelo ya salia, así que dejo a esos 2 cabrones y me jale a tomar el siguiente avión.
En la sala de espera de este avión mencionaron mi nombre y el de una tal cristina, y ahi vamos los 2 a ver que pedo; nos dijeron que no se había ocupado ningún asiento de clase ejecutiva en ese vuelo, que si queríamos acuparlos nosotros, psss quienes somos pa' decir que no, ja. Ella es cristina y casualmente, es colombiana y llego en el mismo vuelo que la otra colombiana loca. Ya la comenzaba a ver guapona hasta que comento que iba a las francias a ver a su novio, pfff, el amor. Ya en clase ejecutiva, las azafatas entre que nos ofrecían chelas, vinos y güiskis y nosotros entre que pisteabamos y pisteabamos, a las 2 horas ya nos estábamos contando nuestras penas, snif. En este tramo del viaje me estaba arrepintiendo por no haberme ido a colombia en lugar de europa, snif.
Así que llegue a paris hasta el culo de pedo y con un chingo de chelas San Miguel y güiskitos de dudosa procedencia en la panza y la cabeza, dispuesto a reunirme con gloria y cinthya en la torre eiffel, cabe mencionar que desde el avión yo veía clarisimo 2 torres, pero bueno, bendita San Miguel.
Me despedí de cristina y su novio. Y mi primer encuentro mexicanohastaelculodepedo-frances fue, pa' variar, con otras viejas quienes seguramente me vieron mas perdido que una caguama abierta a las 10 de la mañana, así que con ayuda de su ingles-frances mocho y mi ingles noteentiendonimadresperolanzotemiradaslujuriosasparaponerenaltoaméxico llegue a eiffel, y ahí estaba, parado en los campos de marte, frente a una torresota, cargando mi equipaje, lleno de esperanzas, sueños y una pinchi cruda que comenzaba porque había dejado de pistear casi una hora...